En la competencia por atraer a los mejores talentos, las empresas familiares destacan por sus recursos y atributos únicos, otorgándoles una ventaja sobre aquellas que no son familiares. En vista de los desafíos emergentes en el mundo empresarial, un informe reciente de la consultora EY resalta la importancia de adaptarse, progresar y promover una cultura del talento revitalizada. Este enfoque contribuye al desarrollo sostenible, al fortalecer la cohesión y la estabilidad a largo plazo en la empresa y la comunidad.